¿Por qué enfermamos? ¿Cómo enfermamos?

¿Existe la suerte? Esta pregunta nos la hemos hecho todos alguna vez, sin encontrar respuesta para ella. Lo que llamamos suerte es un enigma que escapa a nuestra lógica y raciocinio, por eso la perseguimos sin conseguir alcanzarla. Forma parte de ese misterio intangible que está detrás de una realidad oculta, que no alcanzamos a ver, pero que sin duda obedece a unas causas y leyes que se escapan a nuestra percepción. Sin embargo, todos sabemos que detrás de la buena o mala suerte, hay unos motivos que lo justifican. Pero entonces ¿Por qué nos quejamos cuando sufrimos algún revés en nuestra vida?

                                                                  RELAJACIÓN: A todos nos atrae la palabra relajación , pues estamos inmersos en la vorágine de un ritmo de vida apresurado. Y lo cierto es que no sabemos muy bien por qué y para qué . . .  Resulta muy difícil salir de esta rueda que no cesa en su loco girar. Las grandes ciudades son una fábrica incesante de producir estrés en las personas. Viven en recintos apilados como si fueran colmenas, respiran aire contaminado que altera su organismo a todos los niveles, sufren también contaminación acústica por los constantes ruidos que tiene que soportar, a causa de un tráfico enloquecido y del ambiente en general. Lo triste es que todo este caos ambiental en el que vive la mayoría de la gente, llega a resultarles "normal"  y, el cerebro poco a poco va adaptándose a esa locura de entorno, hasta dejar de sentir o percibir ruidos, aire envenenado . . . Y la gente va acomodándose dentro de "confort" de

                                              MEDITAR